Escribe: Hugo Caporale

Tigre quedó eliminado de una Copa Argentina que si hacemos una encuesta muy pocos hinchas tigrenses lamentarán por mucho tiempo.

La sensatez decía que este partido tenían que jugar aquellos con pocos minutos: Flores, Sosa, Baldi, Armoa, Salomón, Leizza, Magnin y algún chico más. Los titulares habían hecho un esfuerzo notable mientras Madryn suspendió con Morón y llegó descansado.

Más allá de un segundo tiempo de ida y vuelta donde el Matador remontó dos goles, quedaron claras un par de cosas.

Marinelli y Magnín están lejos del nivel competitivo que requiere la primera división. El arquero hizo la estatua en el tercer gol de Deportivo y el guapo siempre estuvo fuera de foco dilapidando un penal.

Los jugadores siempre van a querer estar presentes, pero el DT tiene la responsabilidad de cuidar a su tropa. Prediger se fue con una contractura y es una preocupación innecesaria para enfrentar a Racing.

Como alguna vez fue Riestra, Estudiantes, Deportivo Merlo o Douglas Haig volvemos a quedar afuera con un cuadro de una categoría inferior.

Ahora a apuntar los cañones al torneo.