Escribe: Hugo Caporale

“El hombre le hace caricias al caballo, para domarlo” decía Facundo Cabral.

Estamos acostumbrados a medios que no se cansan de adular y quedar bien con los protagonistas para tener una nota sin saber que “el dulce arruina los dientes”. Al pobre Chimi vivo pidiéndole cosas. “Que la reserva copie los movimientos de la primera porque cuando el técnico lo necesite van a estar acostumbrados al juego” o “Dale prioridad a los que tienen que hacerle contrato en 3 meses porque los demás tienen tiempo y no los van a dejar libres”.

Antes del partido con Velez (escolta de Boca) analizaba con Carlos Caporale la actuación de sus chicos
“Muy feliz porque se están dando los resultados,pero verlos jugar bien me pone mas contento.

Superamos una racha adversa que nos alejó del primer lugar pero estamos en camino”

“Vélez es especial porque trabaja muy bien en inferiores. Aparte nos dejó afuera en el torneo anterior y en un partido donde fuimos perjudicados. Vamos a plantear un partido de igual a igual y tenemos muchas chances de ganar”.

“Me gusta estudiar a los rivales. Con Godoy Cruz sabíamos como jugaban y donde había que presionar para robar la pelota y crearles problemas. No dejamos que jueguen cómodos”.

“Físicamente estamos muy bien. Jugamos 3 partidos en una semana con poca rotación. Eso habla bien de las profes tanto de reserva como de inferiores. Me saco el sombrero por ellos y por los chicos que se cuidan para no dar ventajas. Sienten mucho la camiseta y además buscan mejorar todos los días”
Ardua tarea la de manejar un grupo muy numeroso. Con jóvenes que surgen cotidianamente. Darles a cada uno su chance no es sencillo. Tarea de un técnico con convicciones propias que sabe que es forjador de sueños e ilusiones