El Matador sigue sin reacción, cada vez juega peor y sigue sumando derrotas. Esta vez, San Lorenzo le ganó dos a cero y  lo dejó al borde el abismo emocional.

Pareciera muerto en vida. Cada partido es una oportunidad y cada partido es otra nueva decepción.

El entrenador busca variantes, pero no encuentra respuestas en nadie, ni futbolísticas ni anímicas.

San Lorenzo con poco se lo ganó muy bien y como suele suceder habitualmente, cuando el rival se pone en ventaja, pareciera partido liquidado.

Sin dudas, el peor arranque de la historia con uno de los peores equipos de todos los tiempos, al menos en primera división.